Chichón a la carta. Mucho más que anís a 45 minutos de Madrid

La gastronomía de Chinchón no necesita presentación. Además de su anís, famoso mundialmente, es la tierra del ajo, de la leche frita y los dulces, y de las carnes asadas acompañadas de un buen vino. Uno de los municipios con más trabajo turístico de la región, que ha reunido este lunes a sus empresarios y dirigentes en un almuerzo con los medios en Madrid para presentar lo más destacado de sus fogones.

Un encuentro para remarcar algo que ya es bien conocido para muchos y que ya destacamos en artículos anteriores. En Chinchón se come bien. Y no solo se come, pues los hosteleros (sobre todo hosteleras) presentes en el acto no han vacilado en destacar que es un buen lugar donde pasar el sábado noche, donde cada fin de semana llena de vida a la pequeña población de apenas 5.000 habitantes. 

El ajo. Punto de unión de la propuesta chinchoneta

Al igual que hablar de este pueblo sin mencionar su anís es inevitable, también merece la misma mención el ajo. No en vano los tres platos presentados a la prensa en el evento tenían este producto como hilo conductor. Desde un revuelto hasta una carne al ajo, su toque de sabor es un emblema de los establecimientos de Chinchón.

El Jazz también es de pueblo

Con la gran capital a solo 45 minutos, Chinchón se busca ofrecer un ocio diferenciado, más cercano. Algo que se puede comprobar en el Mercado Medieval, el gran evento carnavalero del sur de Madrid, pero que promete conquistar en otras muchas fechas. La alcaldesa del municipio, María Luisa Fernández, no ha dudado en remarcar el gran evento del pueblo: la representación de la pasión de Cristo en Semana Santa. O eventos de nueva creación y que aparentan atractivos para el amante de la música, como el Festival de Jazz o las visitas teatralizadas por sus monumentos. 

En definitiva, el celebrado en Madrid ha sido un evento con el objetivo de remarcar la "Marca Chinchón". Una de las denominaciones más conocidas a nivel nacional, e incluso con repercusión internacional, que representa a la que es sin duda una de las joyas turísticas de la comunidad madruleña. Si algo no se le puede negar a este pueblo es que se vende bien al exterior.